Una Lástima!

He estado haciendo un regalo para Andrés, que recibía su primera comunión hoy. Quería que fuese una cosina muy especial porque es el sobrino de una de mis mejores amiga. Así que me pasé toda la semana pasada modelando su regalo para que se pareciera lo máximo posible a él. El jueves, a solo un día de dárselo a su tía para que se lo llevase a Zamora, donde era el evento, me pasa lo que nunca: el horno me da problemas y la carita de Andrés sale como si hubiese estado en una cabina de rayos UVA sin factor protector.
Nunca se me había quemado una pieza, ni siquiera cuando empecé a hacerlas. Es desesperante cuando después de haber terminado con satisfacción, al salir del horno tiene la carita así:

Pobre, se quedón sin facciones. Se quemó el tono de los labios, rubor.., y la carita se agrietó. Le había hecho hasta su cámara de fotos, para que no perdiese detalle de uno de los días más emocionantes de su vida.